El técnico Adrián Colunga apostaba por una línea defeniva de tres centrales, con la incorporación de Sekou en medio y abriendo más a Mier por la derecha. Con ese esquema trató de imponer su juego con mayor insistencia, aunque sus aproximaciones apenas generaron verdadero peligro en área rival.  El Teruel, por su parte, apostó por un fútbol más físico, buscando el contacto y la disputa en cada balón dividido, una propuesta que solo se tradujo en una tarjeta amarilla pero que le permitió mantenerse firme atrás e incluso protagonizar alguna llegada aislada en ataque con cierto peligro.

La ocasión más clara de los primeros 45 minutos llegó en el 42’, cuando Flakus disfrutó de una oportunidad inmejorable para inaugurar el marcador con un disparo cruzado que rebasó la portería rival rozando el palo. Apenas unos instantes después, una brillante acción individual de Pedro Benito —rompiendo líneas en conducción— terminó en un pase filtrado nuevamente para Flakus dentro del área, que volvía a rozar el primer tanto del encuentro. Fue, sin duda, el tramo de mayor inspiración para los granas, que encadenaron varios minutos de dominio, presencia ofensiva y sensación de peligro constante.

Con ese impulso, el conjunto grana se marchó al descanso como claro dominador, transmitiendo mejores sensaciones, a falta únicamente de transformar su superioridad en goles.

Tras el descanso Colunga daba entrada a Pedro León por Ekain, buscando mayor control en medio campo y más adelante en el 63' a Cristo Romero por Andrés López para volver a una defensa de 4 con la apuesta clara de ir a por la victoria. A consecuencia de arriesgar con tantos hombres arriba, se producían errores en salida de balón, con la mayoría de hombres granas en fase ofensiva, sin apenas apoyo para la salida de balón teniendo en cuenta que uno de los centrales era Sekou, jugador muy efectivo al corte pero que no destaca por su buen pie.

En vistas de que el equipo no lograba llegar a portería, con serios problemas para filtrar pases arriba y sacar desde atrás balón, el técnico grana volvía a repoblar el mediocampo con Isi Gómez y João Palmberg, rotando a Antonio David, jugador con mejor salida desde atrás, aunque no brilló, en el lugar de Sekou.

El conjunto aragonés seguía muy cómodo atrás frente al poco peligro que ocasionaban las llegadas de los murcianos y finalmente el partido no pasó del empate, lo que corta la racha de dos victorias ligueras consecutivas desde la llegada de Colunga al banquillo.